Desde su asunción, el presidente Javier Milei recortó la coparticipación a las provincias. En este marco, algunos distritos se vieron más perjudicados que otros. En San Luis, la coparticipación de marzo disminuyó un 27%. En enero había caído un 12% y en febrero un 28%.
La provincia más afectada fue La Rioja, junto con otros distritos del norte argentino, y la menos impactada, la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Según el informe del instituto, solamente por el impacto de la baja en las transferencias nacionales automáticas y no automáticas, el ingreso de las provincias habría caído entre enero y marzo un 1,8% para los distritos menos afectados y un 36,4%, en el caso de los más golpeados.
La comparación se hizo frente al mismo trimestre del 2023 y en términos reales. Es decir, descontando la inflación.
En un extremo está CABA: allí, las transferencias nacionales tienen un impacto menor en el ingreso total. Por contrapartida, en la provincia de La Rioja (donde las transferencias nacionales no automáticas tienen la máxima participación), el impacto puede haber sido del orden del 35%.
Desde que asumió Milei, el Gobierno nacional ejecutó la mayor reducción de gasto público de los últimos 30 años. Según Iaraf, este brutal ajuste, sumado a la reducción real de la masa monetaria, provocó una importante caída del nivel de actividad.
La baja en la actividad trajo como consecuencia una caída generalizada de la recaudación tributaria, con excepción de los derechos de exportación y del Impuesto Pais. No obstante, ambos no son coparticipables.