Este martes, el Senado provincial dio media sanción por unanimidad al proyecto de ley de actualización del sistema electoral, presentado por el Ejecutivo. Esta reforma propone la implementación de la Boleta Única de Papel (BUP) y la eliminación de la Ley de Lemas implementada por la gestión de Alberto Rodríguez Saá en las últimas elecciones, una ley considerada “vetusta y tramposa” por el gobernador Claudio Poggi, debido a que no garantiza que el candidato más votado por la sociedad sea el que asuma el cargo.
El nuevo proyecto aprobado, que ahora pasará a la Cámara de Diputados para su tratamiento, se basó en un dictamen elaborado en conjunto por una comisión especial que analizó el régimen electoral vigente y los distintos sistemas de votación, para asegurar que las próximas elecciones fueran transparentes y confiables. Esta comisión estuvo integrada por miembros del Poder Ejecutivo y Legislativo, además de distintos actores políticos y sociales que enriquecieron el trabajo y garantizaron que fuese representativo.
La BUP reemplaza a las boletas partidarias tradicionales: en lugar de múltiples boletas, los votantes encontrarán en una sola hoja todas las opciones de candidatos. La estructura del nuevo formato contempla en una primera columna la identificación de la agrupación política, en la segunda el número de lista y en las subsiguientes los distintos cargos electivos (gobernador, senador provincial, diputados provinciales, intendentes y comisionados).
Esta disposición simplifica el proceso y asegura que cada votante tenga acceso completo a todas las opciones electorales. La BUP permite seleccionar los candidatos de forma más clara, al reducir el riesgo de faltantes o manipulación de boletas en el cuarto oscuro.
El proyecto aclara que el Tribunal Electoral Provincial será el ente responsable de la producción y distribución de las boletas, mientras que el Poder Ejecutivo cubrirá los costos para asegurar una boleta por cada elector registrado en el padrón electoral.
El senador por Pueyrredón, Martín Olivero, señaló que la BUP también implica una mayor igualdad para todas las fuerzas políticas. “Este sistema termina con las denuncias de faltante de boletas y con el voto cadena. Además, el puerta a puerta ya no será necesario; nadie tendrá que distribuir boletas. Esto permitirá que incluso los partidos más pequeños, que no siempre pueden contar con fiscales en todos los establecimientos, no necesiten reponer o enfrentar la situación de quedarse sin ellas, algo que fue denunciado en las elecciones anteriores”, aseguró.