El Concejo Deliberante de la ciudad de San Luis aprobó hoy una ordenanza que prohíbe la actividad informal de trapitos (cuidadores de vehículos) y lavacoches en la vía pública.
La iniciativa fue presentada por el intendente Gastón Hissa, luego de una reunión el 9 de abril con la ministra de Seguridad, Nancy Sosa, para atender reclamos de vecinos afectados por estas prácticas.
Se prohíben así servicios informales en la vía pública relacionados con vigilancia, cuidado, lavado o estacionamiento de vehículos a cambio de dinero, actividades comúnmente realizadas por trapitos y lavacoches.
En casos de vulnerabilidad social o económica, se activan acciones de apoyo desde Secretaría municipal y posibles convenios con la Provincia y Nación, incluyendo programas de capacitación en oficios.
La votación fue respaldada por ocho concejales del bloque oficialista “Por San Luis”, mientras que los ediles del PJ se retiraron del recinto antes de votar, criticando el procedimiento y argumentando que la norma estigmatiza la vulnerabilidad social.